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La COP16, celebrada en Cali, Colombia, del 21 de octubre al 1 de noviembre de 2024, fue una cumbre clave para abordar la crisis de biodiversidad que enfrenta el planeta. Aunque se lograron avances en algunas áreas, también quedaron evidentes varios desafíos y problemas que la comunidad internacional deberá resolver para cumplir con las metas de conservación propuestas en el Marco Global de Biodiversidad Kunming-Montreal.<h3>Principales resultados y acuerdos</h3><ol><li>Revisión del marco global de biodiversidad Kunming-Montreal: Uno de los objetivos centrales fue evaluar el avance de los países en la implementación del Marco Global de Biodiversidad Kunming-Montreal, que busca detener la pérdida de biodiversidad para 2030. Si bien varios países han alineado sus Estrategias y Planes de Acción Nacionales (NBSAPs) con estas metas, el progreso es desigual y el compromiso financiero sigue siendo una barrera importante. Este proceso de revisión dejó en evidencia que, sin una acción coordinada y acelerada, es poco probable que se cumplan los objetivos para 2030.</li><li><span style="font-family: inherit; font-size: calc(18px * var(--body-fontSize, 1)); font-style: var(--body-fontStyle, normal);" data-mce-style="font-family: inherit; font-size: calc(18px * var(--body-fontSize, 1)); font-style: var(--body-fontStyle, normal);">Mecanismo de reparto de beneficios de la Información de Secuencias Digitales (DSI): En un intento por promover la equidad, la COP16 avanzó en el establecimiento de un mecanismo para la distribución justa de beneficios derivados del uso de información de secuencias digitales sobre recursos genéticos. Sin embargo, este mecanismo es voluntario, y algunos países expresaron preocupación de que esta falta de obligatoriedad limite su eficacia. Las naciones en desarrollo, que suelen ser ricas en biodiversidad, advirtieron que sin un sistema obligatorio, podrían seguir sin recibir una compensación justa por el uso de sus recursos.</li><li>Reconocimiento de los derechos de las comunidades indígenas y locales: Un avance positivo fue el reconocimiento del rol fundamental de las comunidades indígenas en la conservación de la biodiversidad. Sin embargo, el proceso para formalizar su participación en la toma de decisiones sigue siendo un desafío, especialmente en países donde estas comunidades carecen de representación política o donde sus derechos no están plenamente protegidos.&nbsp;</li></ol><h3>Desafíos y problemas pendientes de la COP16</h3><ol><li>Falta de financiación adecuada: Uno de los problemas más destacados fue la falta de consenso sobre una estrategia de financiación robusta para implementar las metas de biodiversidad. Aunque se estableció el objetivo de movilizar fondos, la cantidad y procedencia de estos recursos sigue siendo incierta. Los países en desarrollo insisten en que las naciones ricas asuman una mayor responsabilidad financiera, dado que estas últimas son las principales responsables de la degradación ambiental global. Sin embargo, los países desarrollados mostraron reticencia a comprometerse con aportes significativos sin una mayor claridad en la rendición de cuentas.</li><li>Falta de mecanismos de monitoreo y evaluación eficaces: &nbsp;La COP16 también destacó la ausencia de un sistema eficaz para monitorear el avance de los compromisos adquiridos por cada país. Aunque se aprobó la creación de un marco de seguimiento, aún quedan por definir los mecanismos específicos que permitan evaluar de manera precisa los avances en biodiversidad. Sin indicadores claros y reportes periódicos, el riesgo es que los compromisos queden en simples declaraciones sin consecuencias prácticas. </li><li>Discrepancias en la gobernanza de los fondos para la biodiversidad: Además de la falta de recursos, persisten diferencias importantes sobre cómo deberían gestionarse los fondos destinados a la biodiversidad. Algunos países abogan por un enfoque descentralizado, en el que cada nación pueda decidir cómo utilizar los recursos, mientras que otros insisten en una mayor supervisión internacional para asegurar que los fondos se utilicen adecuadamente.&nbsp;</li></ol><h3> Conclusión: Un camino aún lleno de retos</h3> Aunque la COP16 logró avances en la conservación de la biodiversidad, quedó claro que los desafíos son numerosos y complejos. La falta de financiación adecuada, los compromisos no vinculantes y la ausencia de mecanismos efectivos de monitoreo y gobernanza son problemas que amenazan con socavar los esfuerzos globales de conservación. Si bien la COP16 representó un paso adelante, es evidente que la comunidad internacional deberá intensificar su compromiso para alcanzar los objetivos de biodiversidad para 2030.La conservación de la biodiversidad requiere no solo voluntad política, sino también un financiamiento real y un compromiso con la rendición de cuentas. Si estos elementos no se fortalecen, la COP16 podría quedar como un esfuerzo más que, aunque bien intencionado, resultó insuficiente para enfrentar la crisis de biodiversidad que enfrenta el planeta.

COP16 2024: resultados y desafíos de la conferencia

En un entorno empresarial europeo cada vez más competitivo y consciente de la sostenibilidad, las empresas deben alinearse con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) si desean mantenerse relevantes y exitosas. La sostenibilidad pasa de ser opcional a una prioridad global, y lo vemos, tanto gobiernos como empresas, en las medidas concretas que toman para abordar los desafíos medioambientales, sociales y económicos. En este contexto, el Pacto Mundial de las Naciones Unidas ha publicado el primer barómetro europeo sobre los ODS, ofreciendo una visión integral del progreso del sector privado en la integración de los ODS en sus estrategias. A continuación detallo los principales hallazgos.&nbsp;Como sabemos, la integración de los ODS en las estrategias corporativas es fundamental para que las empresas puedan adaptarse a las nuevas demandas del mercado y a las crecientes regulaciones de sostenibilidad. Según el informe del Pacto Mundial, un 59% de las empresas europeas ya tienen los ODS integrados en su estrategia, sin embargo, la profundidad de esta integración aún varía significativamente entre sectores y tamaños de empresas. Las pequeñas y medianas empresas (PYMES) enfrentan mayores retos, mientras que las grandes corporaciones han avanzado más rápidamente, impulsadas por las crecientes demandas de los inversores y regulaciones como la Directiva de Informes de Sostenibilidad Corporativa (CSRD).Es importante destacar que el Pacto Verde Europeo ha jugado un papel fundamental impulsando esta integración. Su ambiciosa hoja de ruta para lograr una economía climáticamente neutra para 2050 ha motivado a las empresas a revisar sus modelos de negocio, priorizando la sostenibilidad.<h3>Acciones Relacionadas con los ODS</h3>Las acciones tomadas por las empresas europeas en relación con los ODS son diversas, pero los esfuerzos más notables se centran en igualdad de género (ODS 5) y acción climática (ODS 13), concretamente abordando temas de igualdad de representación, participación y liderazgo en todos los niveles de gestión, igualdad de remuneración por trabajo de igual valor, y reducción de emisiones netas.&nbsp;<h3>Impactos en los ODS: Monitoreo y Evaluación</h3>Una de las mayores oportunidades de mejora para las empresas europeas es el monitoreo y evaluación de su impacto en los ODS. A pesar de que muchas organizaciones están comprometidas con la sostenibilidad, sólo un tercio cuenta con Indicadores de desempeño con objetivos específicos, medibles y con plazos determinados, lo cual es clave para evitar el "greenwashing" y asegurar que las iniciativas de sostenibilidad tengan un impacto real y verificable.La capacidad para medir y reportar adecuadamente estos impactos es clave, ya que en Europa se está avanzando hacia un marco regulatorio más estricto en términos de presentación de informes de sostenibilidad, como es la CSRD.&nbsp;<h3>Comunicación</h3>En cuanto a la comunicación, las empresas son cada vez más conscientes de la necesidad de transmitir de manera efectiva sus esfuerzos en sostenibilidad. El 53% de las empresas utilizan los ODS en sus comunicaciones internas y externas, sin embargo, el 40% aún no publican un informe de sostenibilidad que los incluya​.Mejorar las prácticas de comunicación y divulgar información verificable sobre los progresos en los ODS no solo fortalece la relación con los consumidores, sino que también genera confianza entre los inversores. De hecho, las empresas que comunican de manera efectiva sus esfuerzos de sostenibilidad tienden a atraer más inversiones, especialmente en un contexto donde las finanzas sostenibles están ganando tracción.<h3>Oportunidades de Acción para las Empresas Europeas</h3>Las empresas europeas tienen grandes oportunidades para destacar y ser líderes en sostenibilidad. El informe destaca varias áreas clave donde las empresas pueden actuar:<ol><li>Innovación en economía circular: Aprovechar los recursos de manera más eficiente y reducir los desechos es una de las áreas más prometedoras para generar un impacto positivo tanto ambiental como económico.</li><li>Inversión en energías renovables: Las empresas que lideren la transición hacia fuentes de energía limpia mejorarán su huella de carbono, además de reducir costos a largo plazo y generar valor a sus inversores.</li><li>Colaboraciones intersectoriales: Los ODS requieren una colaboración más allá de los sectores tradicionales. Formar alianzas público-privadas puede ser clave para implementar soluciones innovadoras a gran escala.</li></ol><h3>ODS en España</h3>España se ha consolidado como uno de los países europeos más comprometidos con los ODS. Según el barómetro del Pacto Mundial, las empresas abordan principalmente los ODS de igualdad de género (ODS 5), energía asequible y no contaminante (ODS 7), y trabajo decente y crecimiento económico (ODS 8), siendo el plan de igualdad (65%) o trabajo balanceado y flexible (60%), y teletrabajo (55%) las medidas más implementadas.A medida que Europa se encamina hacia un futuro más sostenible, las empresas que alineen sus modelos de negocio con los ODS no solo estarán mejor posicionadas para ser competitivas, sino que también contribuirán a un impacto positivo en la sociedad y el planeta. El camino está trazado, y las oportunidades están al alcance. Ahora es el momento de actuar.&nbsp;<h3>¡Contacta aquí con <a data-mce-href="https://letsmovetheworld.com/contacto" href="https://letsmovetheworld.com/contacto">Let's Move The World</a> para iniciar tu camino en la sostenibilidad!</h3>

La clave para ser competitivo: Alinearse con los ODS y el marco europeo de sostenibilidad

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A transposição lenta da Diretiva de Relatório de Sustentabilidade Corporativa (CSRD) em Portugal está gerando preocupações significativas entre as empresas do país, especialmente no contexto de um quadro regulatório europeu que exige uma rápida adaptação às novas normas de reporte de sustentabilidade. Embora a diretiva tenha entrado em vigor a nível da União Europeia, Portugal, entre outros países, enfrenta um cenário em que a transposição para a legislação nacional ainda não foi finalizada, o que cria um cenário de incerteza e pode dificultar a preparação adequada das empresas para o cumprimento total das exigências observando os prazos estabelecidos.<h2>O Cenário Atual: principais obstáculos reportados</h2>Acredita-seque apenas 41% das empresas portuguesas estão confiantes na sua capacidade de cumprir as exigências da CSRD dentro dos prazos. Esse valor é consideravelmente inferior ao observado em nível global, onde 63% das empresas sentem-se preparadas. Entre os maiores desafios para as empresas em Portugal estão:<ol><li>A complexidade da cadeia de valor: 67% das empresas portuguesas identificaram a gestão de cadeias de valor complexas como um dos maiores desafios, em comparação com 59% globalmente. A CSRD exige que as empresas reportem impactos não apenas das suas operações diretas, mas também ao longo de toda a cadeia de fornecimento, o que pode aumentar significativamente a complexidade de coleta de dados​.</li><li>A falta de dados de qualidade e ausência de sistemas robustos para a coleta e processamento das informações​​: 47% das empresas portuguesas afirmaram que a qualidade dos dados disponíveis é insuficiente para cumprir as exigências da CSRD. A diretiva requer informações precisas e detalhadas sobre diversos aspetos de sustentabilidade, o que implica na implementação de novos sistemas tecnológicos e metodologias de monitorização​.</li><li>Cumprimento de prazos​​: O tempo para implementação total da diretiva é um desafio adicional, com 50% das empresas em Portugal a destacar os prazos apertados como uma barreira. Sem uma transposição clara, há um risco de que muitas empresas não consigam se preparar adequadamente para os prazos exigidos​​.</li></ol>A CSRD exige que as empresas, especialmente as de grande porte e aquelas cotadas em bolsas, reportem informações detalhadas sobre o impacto das suas atividades em questões ambientais, sociais e de governança (ESG). Este processo vai muito além dos requisitos anteriores, uma vez que impõe a obrigatoriedade de que seus relatórios sejam elaborados de manera que permita uma comparação com relação aos financeiros, o que inclui a verificação feita por auditorias externas. No entanto, o atraso na transposição da diretiva para o ordenamento jurídico português significa que as empresas estão a operar num vácuo regulatório, sem diretrizes claras sobre o que será exigido em termos de penalizações e prazos finais​.<figure id="figure-aikud63tomm2dga0ut" class=""><img id="aikud63tomm2dga0ut" src="https://images.unsplash.com/photo-1625890917198-2b5db43bf6a8?crop=entropy&amp;cs=tinysrgb&amp;fit=max&amp;fm=jpg&amp;ixid=M3wyNjI5NjF8MHwxfHNlYXJjaHw0M3x8d29ycnl8ZW58MHx8fHwxNzI5MTc4NjExfDA&amp;ixlib=rb-4.0.3&amp;q=80&amp;w=1080" alt="man in black jacket and blue denim jeans standing on sidewalk during daytime" title="man in black jacket and blue denim jeans standing on sidewalk during daytime" class="object-cover bg-gray-100 rounded-lg md:rounded-xl lg:rounded-2xl" style="aspect-ratio: 16/9; object-position: center center;" data-corners="default" data-aspect="16:9" data-caption="" data-positionx="undefined" data-positiony="undefined" data-fullwidth="false" data-mce-src="https://images.unsplash.com/photo-1625890917198-2b5db43bf6a8?crop=entropy&amp;cs=tinysrgb&amp;fit=max&amp;fm=jpg&amp;ixid=M3wyNjI5NjF8MHwxfHNlYXJjaHw0M3x8d29ycnl8ZW58MHx8fHwxNzI5MTc4NjExfDA&amp;ixlib=rb-4.0.3&amp;q=80&amp;w=1080" data-mce-style="aspect-ratio: 16/9; object-position: center center;"></figure><h2>Muito se cobra, pouco se faz... onde está a solução?</h2>No entanto, no meio deste cenário incerto, as consultoras de sustentabilidade surgem como aliadas essenciais. Elas não apenas ajudam as empresas a adaptar-se às exigências regulatórias, como também identificam oportunidades para integrar práticas de sustentabilidade que aumentam a competitividade e mitigam riscos futuros.As consultoras desempenham um papel fundamental ao facilitar a implementação de sistemas de coleta e gestão de dados ESG, auxiliando na identificação de riscos ao longo da cadeia de valor e garantindo que as empresas estejam prontas para as auditorias externas impostas pela CSRD. Este apoio é vital, sobretudo num contexto onde as empresas nacionais relatam um nível de confiança significativamente menor em comparação com os seus pares globais.Apesar dos desafios apontados anteriormente, muitas empresas portuguesas reconhecem os benefícios do cumprimento da CSRD e que a nova diretiva ajudará a mitigar riscos e a criar um modelo de governança mais eficaz​. Além disso, a conformidade com os requisitos da CSRD pode trazer uma série de vantagens competitivas, como o acesso mais fácil a capital sustentável, melhoria na reputação da marca e o fortalecimento das relações com os stakeholders​.<figure id="figure-cm41hntn8m2dgqpgk" class=""><img id="cm41hntn8m2dgqpgk" src="https://images.unsplash.com/photo-1553877522-43269d4ea984?crop=entropy&amp;cs=tinysrgb&amp;fit=max&amp;fm=jpg&amp;ixid=M3wyNjI5NjF8MHwxfHNlYXJjaHwyMHx8QnVzaW5lc3MlMjBDb25zdWx0aW5nfGVufDB8fHx8MTcwNjgyMzA4Nnww&amp;ixlib=rb-4.0.3&amp;q=80&amp;w=1080" alt="man using MacBook" title="man using MacBook" class="object-cover bg-gray-100 rounded-lg md:rounded-xl lg:rounded-2xl selected" style="aspect-ratio: 16/9; object-position: undefined undefined;" data-corners="default" data-aspect="16:9" data-caption="" data-positionx="undefined" data-positiony="undefined" data-fullwidth="false" data-mce-src="https://images.unsplash.com/photo-1553877522-43269d4ea984?crop=entropy&amp;cs=tinysrgb&amp;fit=max&amp;fm=jpg&amp;ixid=M3wyNjI5NjF8MHwxfHNlYXJjaHwyMHx8QnVzaW5lc3MlMjBDb25zdWx0aW5nfGVufDB8fHx8MTcwNjgyMzA4Nnww&amp;ixlib=rb-4.0.3&amp;q=80&amp;w=1080" data-mce-style="aspect-ratio: 16/9; object-position: undefined undefined;" data-mce-selected="1"></figure><h2>Conclusão</h2>A transposição lenta da CSRD em Portugal coloca as empresas numa situação de incerteza e pressão crescente para cumprir os prazos regulamentares da UE. Todavia, ao recorrer a consultoras de sustentabilidade especializadas, as empresas podem não só garantir a conformidade com a diretiva, como também aproveitar as oportunidades de crescimento e inovação que uma abordagem sustentável oferece. Contudo, apesar da importância deste apoio especializado, o progresso em Portugal continua lento. Muito se cobra das empresas, exigindo prazos rígidos e prevendo sanções severas, mas pouco se faz para verdadeiramente ajudar e guiar as empresas neste percurso ainda tão incerto. Muito se fala sobre os prazos e penalidades, mas há uma lacuna preocupante quando se trata de implementar de forma eficaz e pragmática as diretrizes que a própria lei estipula. Para que a CSRD produza os resultados que realmente pretende, é imprescindível que se avance rapidamente com uma transposição que não só seja rigorosa, mas também adaptada à realidade das empresas, permitindo que estas possam cumprir as suas obrigações de forma eficaz e com impacto positivo no ambiente e na sociedade. Consultoras de sustentabilidad, como Let's Move The World, são capazes de orientar as empresas em cada etapa, desde a implementação de sistemas de monitorização até à elaboração de relatórios que atendam aos requisitos mais rigorosos, preparando-as para um futuro onde a sustentabilidade é um imperativo empresarial.

Desafios da implementação da nova normativa de reporte (CSRD) em Portugal

La gobernanza corporativa se ha convertido en un factor fundamental para el éxito sostenible de las empresas en el siglo XXI. En este contexto, la alta dirección, compuesta por los líderes empresariales, desempeña un papel central en la integración de la sostenibilidad en la toma de decisiones estratégicas, fomentando una cultura corporativa ética y asegurando la transparencia en todas las operaciones. Este artículo examina cómo la alta dirección puede ser un motor clave para transformar las organizaciones, no solo desde el punto de vista financiero, sino también en términos de sostenibilidad social y medioambiental.<h3> El rol de los líderes empresariales en la sostenibilidad</h3> La alta dirección tiene la responsabilidad de liderar el rumbo estratégico de la organización, lo que incluye la identificación de los riesgos y oportunidades asociados a la sostenibilidad. En un entorno empresarial cada vez más marcado por la normativa y las expectativas de los inversores sobre cuestiones ambientales, sociales y de gobernanza (ESG), los líderes deben asegurarse de que la sostenibilidad esté integrada en el corazón de sus estrategias de negocio. Según el Reglamento Delegado de la Unión Europea sobre la presentación de información sobre sostenibilidad, las empresas deben presentar información detallada sobre cómo las cuestiones de sostenibilidad afectan a su desarrollo y resultados. Los directivos, como responsables de la toma de decisiones, tienen que adaptar los modelos de negocio a las nuevas exigencias del mercado, impulsadas tanto por regulaciones como por los consumidores, quienes demandan productos y servicios más responsables. Esta transformación puede incluir desde la reducción de la huella de carbono hasta la implementación de políticas de trabajo equitativas y sostenibles.<h3> Integración de la sostenibilidad en la toma de decisiones estratégicas</h3> Un elemento clave para la alta dirección es la capacidad de integrar la sostenibilidad en la planificación estratégica. Esto va más allá de acciones aisladas como reducir emisiones o mejorar la eficiencia energética; implica redefinir el propósito de la empresa para que la sostenibilidad sea un componente central de la creación de valor a largo plazo. Las directrices establecidas en las Normas Europeas de Información sobre Sostenibilidad (NEIS) exigen que las empresas comuniquen sus estrategias y modelos de negocio, evaluando sus impactos en cuestiones clave como el cambio climático y la biodiversidad. Una integración exitosa de la sostenibilidad en la toma de decisiones implica la creación de planes de transición, la gestión de riesgos ambientales y sociales, y la implementación de métricas claras para medir el progreso hacia los objetivos sostenibles. Este enfoque no solo es esencial para el cumplimiento regulatorio, sino también para mantener la competitividad y atraer inversiones responsables, que se basan cada vez más en criterios ESG.<h3> Fomentar una cultura corporativa ética</h3> Otro papel fundamental de la alta dirección es la creación y el fomento de una cultura corporativa ética. Las decisiones éticas no solo mitigan riesgos legales y financieros, sino que también fortalecen la reputación de la empresa, lo que es crucial en un mundo donde la transparencia y la responsabilidad son altamente valoradas por consumidores e inversores. La cultura organizacional debe basarse en valores sólidos que promuevan la integridad, la equidad y el respeto por el medio ambiente. Los líderes empresariales deben promover políticas internas claras contra la corrupción, fomentar la diversidad e inclusión, y garantizar el cumplimiento de los derechos laborales en todas las etapas de la cadena de valor. Según el estándar ESRS G1, que se refiere a la conducta empresarial, las empresas deben divulgar cómo gestionan las relaciones con los proveedores y qué políticas implementan para prevenir la corrupción y el soborno. Además, es responsabilidad de la alta dirección establecer mecanismos efectivos para detectar y sancionar comportamientos no éticos dentro de la organización, garantizando que existan canales seguros para que los empleados denuncien malas prácticas, y asegurándose de que estas sean tratadas de manera transparente.<h3> Transparencia en todas las operaciones</h3> La transparencia se ha convertido en un pilar fundamental de la gobernanza empresarial moderna, especialmente en lo que respecta a la sostenibilidad. Las nuevas regulaciones europeas exigen que las empresas sean claras y precisas en la divulgación de su impacto ambiental, social y de gobernanza. Esto incluye la presentación de informes que detallen desde las emisiones de gases de efecto invernadero hasta las políticas de diversidad en el lugar de trabajo y la gestión de la cadena de valor. La alta dirección tiene un rol crucial en asegurar que los sistemas de reporte sean robustos y conformes a las mejores prácticas. Esto no solo cumple con los requisitos legales, sino que también refuerza la confianza entre los grupos de interés, incluidas las comunidades, los inversores y los reguladores. La Directiva sobre la Información Corporativa en Materia de Sostenibilidad (CSRD)&nbsp;subraya la necesidad de que las empresas incluyan en sus informes la función de los órganos de administración y supervisión en la supervisión de los temas de sostenibilidad, reflejando un enfoque integrado entre estrategia y gobernanza. La alta dirección juega un papel crucial en la gobernanza de la sostenibilidad dentro de las organizaciones. Los líderes empresariales no solo tienen el deber de integrar la sostenibilidad en sus decisiones estratégicas, sino que también deben fomentar una cultura ética que promueva la responsabilidad social y ambiental. Al garantizar la transparencia en todas las operaciones, las empresas no solo cumplirán con las normativas cada vez más estrictas, sino que también ganarán la confianza de los inversores y consumidores, consolidando su reputación y competitividad a largo plazo. La transición hacia modelos de negocio más sostenibles no es una opción, sino una necesidad para asegurar el éxito futuro de cualquier organización en el entorno empresarial actual.

La alta dirección y su papel clave en la gobernanza

<h3>Introducción a la Taxonomía de la Unión Europea</h3>La Taxonomía de la Unión Europea es un sistema de clasificación que ayuda a las empresas a identificar actividades económicas sostenibles. Su objetivo es promover prácticas que contribuyan a la sostenibilidad ambiental y combatir el cambio climático.Se pretende facilitar la inversión porque las empresas que cumplen con los criterios pueden acceder a nuevas fuentes de financiación. Los inversores están cada vez más interesados en apoyar proyectos sostenibles. Además, las empresas pueden mejorar su imagen de marca. Ser visto como una empresa responsable puede atraer a más clientes y socios comerciales.Este sistema es parte del Plan de Acción de Finanzas Sostenibles de la UE. Las empresas que adoptan la taxonomía pueden mejorar su reputación, y además este marco protege a los consumidores contra el greenwashing, promoviendo la acreditación de afirmaciones ecológicas mediante métodos de huella digital de productos y organizaciones.<figure id="figure-xwmfyhtuzam1je1giu"><img id="xwmfyhtuzam1je1giu" src="https://media.gettyimages.com/id/2161384503/es/foto/closeup-group-businesspeople-talk-esg-strategies-risk-management-workshop-sdgs-report-global.jpg?b=1&amp;s=2048x2048&amp;w=0&amp;k=20&amp;c=5N_Hr04Ns82V_h50DerJqNHiDm3biPEo-jThV1OXiNI=" alt="Closeup group businesspeople talk ESG strategies risk management workshop, SDGs report, global warming, green finance investment eco friendly and net zero waste in boardroom training building." title="Closeup group businesspeople talk ESG strategies risk management workshop, SDGs report, global warming, green finance investment eco friendly and net zero waste in boardroom training building." class="object-cover bg-gray-100 rounded-lg md:rounded-xl lg:rounded-2xl" style="aspect-ratio: 16/9; object-position: center center;" data-corners="default" data-aspect="16:9" data-caption="" data-positionx="null" data-positiony="null" data-fullwidth="false" data-mce-src="https://media.gettyimages.com/id/2161384503/es/foto/closeup-group-businesspeople-talk-esg-strategies-risk-management-workshop-sdgs-report-global.jpg?b=1&amp;s=2048x2048&amp;w=0&amp;k=20&amp;c=5N_Hr04Ns82V_h50DerJqNHiDm3biPEo-jThV1OXiNI=" data-mce-style="aspect-ratio: 16/9; object-position: center center;"></figure>La implementación de la taxonomía tiene un impacto significativo en las empresas. Primero, obliga a las empresas a evaluar y reportar sus actividades sostenibles. Esto puede requerir cambios en la gestión y operaciones.Además, las empresas deben alinearse con los objetivos de sostenibilidad de la UE. Esto puede implicar invertir en tecnologías limpias y reducir las emisiones de carbono.<figure id="figure-6v5m6kvmu9m1je1jaf"><img id="6v5m6kvmu9m1je1jaf" src="https://media.gettyimages.com/id/1768405675/es/foto/visto-desde-detr%C3%A1s-de-una-mujer-de-negocios-cerca-del-edificio-de-oficinas.jpg?b=1&amp;s=2048x2048&amp;w=0&amp;k=20&amp;c=OrtD-x8eCOml07LO9cpDoe6RGovzZYFaNJJFStX3NXc=" alt="Visto desde detrás de una mujer de negocios cerca del edificio de oficinas" title="Visto desde detrás de una mujer de negocios cerca del edificio de oficinas" class="object-cover bg-gray-100 rounded-lg md:rounded-xl lg:rounded-2xl" style="aspect-ratio: 16/9; object-position: center center;" data-corners="default" data-aspect="16:9" data-caption="" data-positionx="null" data-positiony="null" data-fullwidth="false" data-mce-src="https://media.gettyimages.com/id/1768405675/es/foto/visto-desde-detr%C3%A1s-de-una-mujer-de-negocios-cerca-del-edificio-de-oficinas.jpg?b=1&amp;s=2048x2048&amp;w=0&amp;k=20&amp;c=OrtD-x8eCOml07LO9cpDoe6RGovzZYFaNJJFStX3NXc=" data-mce-style="aspect-ratio: 16/9; object-position: center center;"></figure>Las empresas que cumplen con los criterios pueden acceder a nuevas fuentes de financiación. Los inversores están cada vez más interesados en apoyar proyectos sostenibles. Además, las empresas pueden mejorar su imagen de marca. Ser visto como una empresa responsable puede atraer a más clientes y socios comerciales.<h3>Calendario y tipología de empresas afectadas</h3>Enero 2025 –&nbsp; Grandes empresas cotizadas o no con más de 250 empleados y/o facturación de 40 millones de euros y/o 20 millones en activos. También a partir de esta fecha, las instituciones financieras pueden incorporar en sus evaluaciones DNSH (Do No Significant Harm) proyecciones sobre cómo se alinean con ciertos estándares, aunque estas están sujetas a revisión dentro del ciclo de evaluación del año 2024.Enero 2026 – Todas las empresas consideradas de gran tamaño, con más de 250 empleados. Las entidades de crédito pequeñas y no complejas y las empresas de seguros cautivas (aunque podrán solicitar aplazamiento hasta 2028).Enero 2027 – Todas las empresas que cotizan en bolsa, incluyendo a las pequeñas y medianas empresas (PYMEs), que deberán proporcionar reportes siguiendo una versión simplificada de los estándares establecidos por el CSRD y la taxonomía aplicable.<h3>Pasos para la Implementación</h3>Para implementar la taxonomía, las empresas deben seguir varios pasos. Primero, deben evaluar sus actividades actuales y determinar cuáles cumplen con los criterios de sostenibilidad.Luego, deben desarrollar un plan para alinear sus operaciones con estos criterios. Esto puede incluir invertir en nuevas tecnologías y capacitar al personal.Se declara que una determinada actividad es sostenible si cumple, al menos, uno de los 6 objetivos medioambientales:<ol><li>Reducción de la huella de carbono.</li><li>Preparación para el cambio climático.</li><li>Uso eficiente de los recursos acuáticos y marinos.</li><li>Movimiento a una economía de reciclaje.</li><li>Prevención y control de la contaminación.</li><li>Preservación y restauración de la diversidad biológica y los ecosistemas. </li></ol>Además no se debe causar perjuicios significativos (prinicipio de no significant harm – DNSH) a ninguno de los otros objetivos, respetando al mismo tiempo los DDHH básicos y las normas laborales. Tampoco se debe tener un impacto social negativo. Y finalmente se ha de cumplir con los criterios técnicos de selección desarrollados por el Grupo de Selección Técnica (TSG) de la UE.<figure id="figure-vppkee17gwm1je1mho"><img id="vppkee17gwm1je1mho" src="https://images.unsplash.com/photo-1491975474562-1f4e30bc9468?crop=entropy&amp;cs=tinysrgb&amp;fit=max&amp;fm=jpg&amp;ixid=M3wyNjI5NjF8MHwxfHNlYXJjaHwxM3x8YnVzaW5lc3MlMjBzdHJhdGVneXxlbnwwfHx8fDE3MjczNjA4NDB8MA&amp;ixlib=rb-4.0.3&amp;q=80&amp;w=1080" alt="business strategy" class="object-cover bg-gray-100 rounded-lg md:rounded-xl lg:rounded-2xl" style="aspect-ratio: 16/9;" data-mce-src="https://images.unsplash.com/photo-1491975474562-1f4e30bc9468?crop=entropy&amp;cs=tinysrgb&amp;fit=max&amp;fm=jpg&amp;ixid=M3wyNjI5NjF8MHwxfHNlYXJjaHwxM3x8YnVzaW5lc3MlMjBzdHJhdGVneXxlbnwwfHx8fDE3MjczNjA4NDB8MA&amp;ixlib=rb-4.0.3&amp;q=80&amp;w=1080" data-mce-style="aspect-ratio: 16/9;"></figure>Hay 3 KPI para la taxonomía de la UE sobre los que las empresas deben informar:1. Volumen de negocios Volumen de negocios neto, es decir, los importes derivados de la venta de productos y servicios tras deducir los descuentos sobre las ventas, el iva y otros impuestos directamente relacionados con el volumen de negocios. Para la mayoría de las empresas el volumen de negocios total utilizado en los informes de taxonomía es el mismo que el reflejado en la cuenta de ingresos de los informes financieros.2. CapEx — Gastos de capital Las inversiones en activos tangibles e intangibles en ese ejercício analizado antes de la depreciación, la amortización y cualquier nueva valoración asociada a las actividades aptas para la taxonomía. Es el CapEx que cubre los costes en función de ciertas normas internacionales de información financiera (NIIF), como las propiedades, planta y equipo, los activos intangibles, etc., que figuran en la sección Extracto de la definición de CapEx de la Ley Delegada de Divulgación de Información.3. OpEx — Gastos operativos El OpEx utilizado en la taxonomía difiere de lo que la mayoría de las empresas declaran en sus estados financieros. Refleja partes de los gastos operativos.El OpEx se refiere a los costes relacionados con la investigación y el desarrollo, las medidas de renovación de edificios, el arrendamiento a corto plazo, el mantenimiento y la reparación y cualquier otro gasto directo.&nbsp;<h3><a data-mce-href="https://letsmovetheworld.com/contacto" href="https://letsmovetheworld.com/contacto">Let's Move The World</a> ofrece asesoramiento y apoyo para simplificar el proceso de cumplir con los requisitos y maximizar los beneficios.</h3>

La Taxonomía de la Unión Europea: Impacto y Beneficios para las Empresas

Bandera de la Unión Europea en el fondo dorado del campo de trigo. Luz del sol.

<h3>Introducción</h3>El Pacto Verde Europeo es una de las iniciativas más ambiciosas y transformadoras de la Unión Europea en la última década. Lanzado en 2019, su objetivo principal es convertir a Europa en el primer continente climáticamente neutro para 2050. En respuesta a la creciente crisis climática y ambiental, el Pacto busca reconfigurar el modelo económico europeo hacia una economía más sostenible, eficiente en el uso de los recursos y respetuosa con el medio ambiente.A lo largo de estos años, el Pacto Verde ha ido evolucionando y se han presentado varias actualizaciones importantes. Este artículo analiza las últimas novedades del Pacto y su impacto en el panorama empresarial, así como las oportunidades y desafíos que presenta para las empresas que operan en Europa.<h3>¿Qué es el pacto verde europeo?</h3>El pacto verde europeo es una hoja de ruta hacia una economía sostenible que aborda el cambio climático, la pérdida de biodiversidad y la contaminación. Abarca una amplia gama de políticas y sectores, incluyendo la energía, el transporte, la agricultura, la industria y el comercio. Sus objetivos principales incluyen:<ul><li>Reducción de emisiones de gases de efecto invernadero: La UE se ha comprometido a reducir las emisiones en al menos un 55% para 2030 en comparación con los niveles de 1990.</li><li>Economía circular: Promover un modelo económico en el que los recursos se utilicen de manera eficiente y se minimicen los residuos.</li><li>Protección de la biodiversidad: Proteger y restaurar los ecosistemas europeos.</li><li>Eficiencia energética: Fomentar el uso de fuentes de energía renovable y mejorar la eficiencia energética en todos los sectores.</li><li>Transición justa: Garantizar que la transición hacia una economía verde sea equitativa y no deje a nadie atrás.</li></ul><h3>Últimas actualizaciones del pacto verde europeo</h3>En los últimos dos años, el Pacto Verde Europeo ha seguido evolucionando con nuevas iniciativas que buscan acelerar la transición hacia la neutralidad climática y mejorar la resiliencia energética y económica de la Unión Europea. A continuación, se detallan algunas de las actualizaciones más importantes:1. Green Deal Industrial Plan (2023)En 2023, la Comisión Europea presentó el Green Deal Industrial Plan, cuyo objetivo es consolidar a Europa como líder en la industria de tecnologías limpias. Este plan busca mejorar el entorno regulatorio, acelerar el acceso a financiamiento y reforzar las competencias laborales necesarias para la transición hacia una economía verde. Una de sus iniciativas más importantes es el Net-Zero Industry Act, que busca aumentar la producción de tecnologías limpias dentro de la UE, con la meta de cubrir al menos el 40% de las necesidades tecnológicas verdes de Europa para 2030. Esto beneficiará a sectores como las energías renovables, baterías, hidrógeno y almacenamiento energético.2. REPowerEU y la crisis energética (2023) El conflicto en Ucrania ha impulsado a la UE a depender menos de los combustibles fósiles rusos. El plan REPowerEU, presentado inicialmente en 2022, se reforzó en 2023 con metas más ambiciosas. Este plan tiene como objetivo aumentar la capacidad de las energías renovables y mejorar la eficiencia energética en los Estados miembros. Para 2030, el nuevo objetivo de la UE es alcanzar un 42.5% de energías renovables, con la ambición de llegar al 45%. Además, la Comisión ha establecido un nuevo objetivo de mejorar la eficiencia energética en un 11.7% para el mismo año.3. Extensión del comercio de emisiones a nuevos sectores (2024) A partir de 2024, el comercio de emisiones de la UE (ETS) se extenderá a sectores clave como el transporte marítimo y la aviación internacional. Esta medida busca poner un precio a las emisiones de carbono en estos sectores y fomentar la adopción de combustibles más limpios y tecnologías sostenibles. El aumento del uso de combustibles sostenibles de aviación (SAF) y la creación de un mercado de hidrógeno también son prioridades clave en este nuevo esquema.4. Medidas para la economía circular y derecho a reparación (2023) El Pacto Verde también ha dado pasos significativos en la economía circular. En 2023, la Comisión Europea introdujo nuevas normativas para aumentar la circularidad en sectores como el automotriz, incluyendo medidas para mejorar el diseño, la producción y el tratamiento al final de la vida útil de los vehículos. También se abordó el problema del greenwashing y se establecieron regulaciones que garantizan que los consumidores puedan reparar sus productos más fácilmente, fomentando así una mayor durabilidad de los bienes.5. Ampliación del fondo social para el clima Para asegurar que la transición hacia una economía verde sea inclusiva, la Comisión ha reforzado el Fondo Social para el Clima, que proporcionará más de 86 mil millones de euros para ayudar a los grupos más vulnerables a hacer frente a los costos de la transición energética. Este fondo apoya mejoras en la eficiencia energética, la adopción de energías renovables y la movilidad de bajas emisiones.<h3>Impacto del Pacto Verde en la sostenibilidad empresarial </h3>El Pacto Verde Europeo representa tanto un reto como una oportunidad para las empresas. A continuación, se analizan algunos de los principales impactos que está teniendo en el ámbito empresarial.1. Nuevas regulaciones y requisitos Una de las principales formas en las que el Pacto Verde está afectando a las empresas es a través de la implementación de nuevas regulaciones. El cumplimiento de las normativas ambientales se ha vuelto más exigente, lo que obliga a las empresas a reevaluar sus procesos, mejorar su eficiencia energética, y reducir las emisiones de carbono.En particular, las industrias con alta intensidad de carbono, como la manufactura y la energía, están experimentando una presión significativa para reducir su huella ambiental. Las empresas que no cumplan con los requisitos podrían enfrentarse a sanciones y mayores costos, como resultado de los esquemas de comercio de emisiones y los impuestos al carbono.2. Innovación y desarrollo de nuevas tecnologías El Pacto Verde también está impulsando la innovación en tecnologías limpias y sostenibles. Las empresas están invirtiendo en nuevas tecnologías que les permitan ser más eficientes en el uso de recursos y reducir las emisiones. Estas innovaciones no solo están dirigidas a cumplir con los objetivos del Pacto Verde, sino que también pueden ofrecer ventajas competitivas en un mercado que cada vez valora más los productos y servicios sostenibles.Sectores como la energía renovable, la movilidad eléctrica y la economía circular están experimentando un crecimiento significativo, creando nuevas oportunidades para empresas que puedan liderar el cambio hacia una economía baja en carbono.3. Atracción de inversores y consumidores La sostenibilidad ya no es solo una cuestión de cumplimiento normativo; también es una oportunidad para atraer a inversores y consumidores. Los consumidores europeos están cada vez más preocupados por el impacto ambiental de los productos que compran, y muchos están dispuestos a pagar más por productos sostenibles. De igual manera, los inversores están prestando más atención a los criterios ambientales, sociales y de gobernanza (ESG) a la hora de tomar decisiones de inversión.Las empresas que adopten los principios del Pacto Verde y demuestren un compromiso con la sostenibilidad pueden diferenciarse en el mercado y atraer tanto a consumidores conscientes como a inversores responsables.4. Transición justa y responsabilidad social Una preocupación central del Pacto Verde es garantizar que la transición hacia una economía sostenible sea justa e inclusiva. Esto significa que las empresas deben considerar no solo su impacto ambiental, sino también su impacto social. La transición verde ofrece la oportunidad de crear empleos en sectores como la energía renovable y la economía circular, pero también requiere que las empresas apoyen a los trabajadores afectados por la transformación de industrias más tradicionales. Conclusión El Pacto Verde Europeo está redefiniendo el panorama empresarial en Europa, impulsando a las empresas a adoptar prácticas más sostenibles, reducir sus emisiones de carbono y contribuir a una economía circular. Si bien este proceso puede presentar desafíos, también ofrece oportunidades significativas para innovar, atraer inversores y consumidores, y liderar en la transición hacia una economía más sostenible.Las empresas que se adapten de manera proactiva a las nuevas regulaciones y adopten una mentalidad verde estarán mejor posicionadas para prosperar en el futuro, mientras contribuyen a un futuro más limpio y resiliente para todos.

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